Los cachorros callejeros buscan constantemente comida y un lugar seguro donde puedan descansar. Desearían que los humanos que conocen todos los días dejaran de ignorarlos y les dieran la mano que tanto necesitan.
Izzy era una de los perros callejeros que necesitaba urgentemente la compasión y ayuda humana después de dar a luz a una adorable camada de cachorros.
Creyendo que los buenos humanos le mostrarían algo de bondad y amor, llegó a la puerta principal de una tienda Dollar en Jetersville, Virginia.
Se sentó en silencio y miró a la gente a través de la puerta de cristal. Con los ojos llenos de tristeza, les rogaba que se fijaran en ella.
Los compradores quedaron desconsolados al ver a Pittie triste asomándose dentro de la tienda. Su cuerpo estaba cubierto de rasguños. Sólo podían imaginar las dificultades por las que había pasado.
Desde el momento en que miraron sus hermosos ojos, se sintieron encantados con ella. Estaban decididos a ayudarla lo antes posible.
La abrazaron y la alimentaron. Le hicieron saber que estaban allí para ayudarla y que ya no la ignorarían más.
Llamaron a la oficina de Control de Animales y les pidieron que ayudaran a Pittie, más tarde llamada Izzy. Tan pronto como los oficiales llegaron y se encontraron con el doggo, se dieron cuenta de que era una mamá lactante.
Después de una breve búsqueda por la tienda, descubrieron a los adorables bebés peludos de Izzy. Eran vulnerables, hambrientos y necesitaban un hogar cálido.
Sus rescatistas los tomaron suavemente en sus brazos, los colocaron en una jaula y llevaron a la mamá perra y a sus preciosos bebés al Amelia Animal Shelter – Virginia.
El personal los recibió con los brazos extendidos. Al día siguiente los llevaron al veterinario.
“Mamá y los bebés fueron al veterinario hoy y los revisaron, les hicieron pedicura y algunos medicamentos para que todos estuvieran bien encaminados. Todo el mundo está bien y come bien”, compartió el refugio en Facebook.
La mamá perra y sus adorables bebés rápidamente se robaron el corazón de sus cuidadores. Disfrutaron viendo a los bebés peludos tragar la comida que les daban.
El personal del refugio sabía que Izzy necesitaba tomarse descansos ocasionales para cuidar a sus cachorros. Los amigos humanos de Izzy querían asegurarle que ahora estaba a salvo y que su vida y la de sus bebés cambiarían para mejor.
El personal del refugio jugó con ella afuera, dándole golosinas y colmándola de amor. La maravillosa cachorrita agradeció su ayuda y cariño, y su cola no dejaba de menear.
El corazón de Izzy estaba tranquilo al saber que ella y sus cachorros estaban en buenas manos . Nunca más volverán a pasar hambre y serán ignorados.
La dulce familia canina continúa prosperando en el refugio. Disfrutan recibir muchos abrazos de sus amigos del refugio que los adoran.
Tan pronto como estén lo suficientemente sanos, serán dados en adopción. No hay duda de que harán muy felices a sus futuros padres.
Muchas gracias a los buenos humanos que abrieron sus corazones y ayudaron a la adorable familia canina. Esperamos que Izzy y sus dulces cachorros encuentren un hogar lleno de infinito amor y cuidado.
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